La necesidad de personal especializado y con la capacitación técnica necesaria que el sector de la construcción requiere, impulsa la iniciativa de la Fundación Laboral de la Construcción, para convertir la isla de La Palma en un laboratorio formativo que sea referente a nivel nacional. Para conseguir este propósito se ha celebrado una reunión de trabajo de los responsables de la Fundación, encabezados por su presidente Oscar Izquierdo y vicepresidente Luis Aragón con alcaldes, concejales y agentes de desarrollo local de todos los municipios palmeros, así como el Cabildo Insular.
Se trata de aunar esfuerzos para que en todos los municipios se realicen cursos de formación especializados, que permitan contar con una fuerza laboral preparada o capacitada, para afrontar los nuevos retos de la construcción, que tienen que pasar por la sostenibilidad, la descarbonización, la eficiencia energética o la accesibilidad universal.
Esta iniciativa quiere ser referente a nivel estatal, para lo que es fundamental la implicación de todos los municipios. Se trabajará para contar con tres centros formativos permanentes de la Fundación Laboral de la Construcción en la isla, que permita el acercamiento a las distintas zonas comarcales. Se ofrecerá formación para reciclar y actualizar al personal de obra, también para los trabajadores en paro, y se implantarán programas de formación de alternancia en el empleo, PFAES.
Oscar Izquierdo presidente de la Fundación remarca que “es la mejor estrategia para afrontar las potencialidades que tiene la isla. Porque hay que dar respuesta a las necesidades laborales que tienen las empresas y también a la imprescindible mejora de los trabajadores. Con esta iniciativa gana La Palma, que a medio plazo será el referente formativo que imitarán de todas partes, porque se mejorará cualitativa y cuantitativamente una formación exigente y moderna que será la base estructural que permita una verdadera reactivación económica”.
Los peones de la construcción hacen posible la civilización tal y como la conocemos. Sin ellos no habría casas, ni carreteras, ni ciudades, nada. Vas al hospital que fue hecho con la mano de obra de los peones de la construcción, caminas por aceras hechas por los peones de la construcción, la oficina de un ingeniero fue hecha por los peones de la construcción. Un político de turno que pudiera estar en la poltrona haciendo chanchullos con los bolsillos llenos ocupa un local hecho por los peones de la construcción, pero sin embargo el peón casi que no llega a fin de mes. Así es el mundo donde nos toca vivir.
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