Los buques de pasaje procedentes de Italia y cruceros de cualquier origen no podrán entrar en los puertos españoles en dos semanas

El Consejo de Ministros, que se ha reunido hoy de forma extraordinaria, ha considerado necesario aplicar, como medida excepcional para limitar la propagación y el contagio por el COVID-19, la prohibición de entrada en España de buques de pasaje procedentes de Italia, así como de cruceros de cualquer origen que tengan destinos en puertos españoles.

La medida estará en vigor desde las 00.00 horas del día 13 de marzo, es decir, este viernes, hasta las 23:59 horas del 26 de marzo de 2020. Tendrá por tanto un carácter temporal de 14 días que “se podrá prorrogar  por periodos adicionales no superiores a 14 días y evaluada periódicamente teniendo en cuenta la evolución de la epidemia a nivel mundial, y especialmente en Italia”.

Este acuerdo del Gobierno central, significa que este jueves ha abandonado el puerto de Santa Cruz de La Palma el último crucero, el Mein Schiff, al menos en un periodo de dos semanas, que es el tiempo que dura esta prohibición inicial del Gobierno central. La cancelación de los cruceros en plena temporada alta de estas embarcaciones afecta de lleno al puerto de la capital y supone un revés para la actividad económica insular, ya que muchos negocios y empresas de la isla están saliendo adelante gracias al consumo que realizan los cruceristas de estas embarcaciones.