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Economía
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VIII Encuesta de Actividad Comercial

El 80% del comercio confía en mantener las ventas durante el primer trimestre de este año

  • Joyerías y negocios de telecomunicaciones son los que capean mejor la crisis
  • Las librerías y papelería son las que peor lo están pasando

Los comercios no esperan mejoras en el sector en los próximos meses.

A pesar de que el 71% de los empresarios palmeros logró mantener o incrementar sus ventas durante la pasada campaña navideña más del 93,7% no dudan en calificarla como la más dura de los últimos cuatro años. Asimismo, y en lo que a previsiones de futuro se refiere, el 79,6% del tejido comercial confía en mantener sus expectativas de venta durante el primer trimestre de 2011, teniendo en cuenta que comprende el período de rebajas, frente a un 18,7% que augura una disminución y un 2% que confía en incrementar su cifra de negocio.

Esto es lo que se desprende de la VIII Encuesta de Actividad Comercial elaborada por la Delegación de la Cámara de Comercio en La Palma a través de sondeo telefónico y en la que han participado más de 700 empresas vinculadas al sector comercial de la Isla.

No obstante, y a pesar del buen sabor de boca generalizado que ha dejado la campaña navideña, en la que el 27% de los comercios encuestados afirman haber incrementado sus ventas y hasta un 43,8% reconoce que la constancia ha sido la nota dominante durante el último trimestre de 2010, lo cierto es que, al hacer balance contable, un 29,2% de los comerciantes palmeros afirman haber notado una disminución considerable en sus ventas durante este último período del año pasado.

Buena parte del empresariado del sector confiesa, además, estar aplicando todo tipo de estrategias empresariales para poder sobrevivir y hacer más llevadera la situación actual: desde adquirir menos género, hasta aplicar importantes ajustes en sus márgenes comerciales para ofertar productos a precios reducidos y más competitivos, así como todo tipo de promociones y descuentos periódicos como gancho para atraer consumidores. Un esfuerzo al que se suma el encarecimiento del precio de los transportes y al hecho de que los mayoristas hayan reestructurado los plazos de pago.

Estabilidad laboral

La lectura positiva que sigue arrojando el sector comercial de la Isla es la estabilidad laboral que ofrecen los empresarios palmeros a sus empleados. A pesar de las dificultades económicas, el 95,4% de los encuestados afirma mantener estables sus plantillas, un dato similar al de la anterior encuesta. Hay que tener en cuenta, en este sentido, que una gran parte de las empresas comerciales de la Isla se explotan bajo la forma jurídica del autónomo o empresario individual.

Precios y promociones

La necesidad de potenciar el consumo está llevando a los comercios palmeros a apostar por mantener o reducir los precios como estrategia empresarial. De hecho, mientras que el 70% de los encuestados se decanta por mantenerlos, un 30% afirma que aplicará descuentos considerables para competir en el mercado. Tal y como era previsible ninguno de los más de 700 comerciantes palmeros encuestados optará por incrementar los precios en este trimestre.

Por otra parte, y como consecuencia de la debilidad generalizada que sufren los mercados, los empresarios palmeros se mantienen fieles a la tendencia de no incrementar la inversión en sus negocios. Sólo un 1% asegura que ha aumentado su inversión durante el último trimestre, un porcentaje similar al que se prevé para los tres primeros meses de este año.

Análisis sectorial

En líneas generales, todos los subsectores comerciales afirman continuar notando los efectos derivados del estancamiento del consumo, si bien sigue habiendo excepciones como el subsector de las telecomunicaciones donde los empresarios encuestados apuntan incrementos notables en el número de operaciones y en la venta de servicios de reparaciones, fundamentalmente.

Otro subsector que ha registrado indicadores positivos por encima de la media a final de año son las joyerías, que logran mantener ligeramente el pulso a la adversidad. Valoran, además, el incremento de las actividades relacionadas con la compra-venta de oro y el efecto liquidez inmediata que genera en la población.

Por el contrario, uno de los subsectores que afirma sufrir con gravedad los efectos de la crisis en las ventas durante el último trimestre de 2010 es el de papelerías y librerías que, tras la campaña escolar, no ha registrado el esperado repunte de las ventas y prevé un estancamiento generalizado en el comienzo de año. Siguen creyendo que la venta de material escolar en los bazares chinos e Internet les está perjudicando seriamente.

Los concesionarios de vehículos cierran el último trimestre de año sin sobresaltos, manteniendo ligeramente las ventas y las operaciones de recambios y servicios de mantenimiento.

El subsector de ropa, calzado y complementos es, sin duda, el que hace un balance más satisfactorio del último período de año, aunque advierten de la feroz competencia y de los efectos que la nueva competencia de bazares chinos y los mercadillos está generando en sus negocios con la consecuente merma de beneficios.

Es notorio el caso de los establecimientos vinculados a la venta de calzado de gama alta, en los que se ha registrado un incremento significativo de las ventas frente a los de gama media-baja.  Si bien logran salvar el trimestre, los empresarios han notado un estancamiento de las ventas que se traduce en unas cifras de negocio baja.

Similar situación viven los bazares y tiendas de mubles y decoración, donde a pesar del ligero repunte navideño, la tendencia sigue mostrando un estancamiento. No obstante, la mayoría de empresarios encuestados en este subsector confía en estabilizar las ventas y evitar que la situación empeore.

Valoraciones

El presidente de la Delegación de la Cámara en La Palma, Isael Castro Hernández, se muestra optimista respecto a los resultados registrados durante el último trimestre de  2010, que ponen de manifiesto que los empresarios palmeros siguen luchando para capear el temporal y mantienen estable su confianza, sobre todo si la comparamos con el trimestre anterior, en el que más del 70% auguraba un final año extremadamente difícil y no veían síntomas de recuperación económica a corto plazo.

Según explica Castro Hernández, "2011 será, sin duda, un año de cambios, y si lo iniciamos con optimismo aunque sea moderado, estaremos cimentando en firme los primeros pasos hacia la ansiada recuperación".

En esta línea el presidente de la Delegación cameral demanda, una vez más, la agilización de los trámites administrativos para favorecer el despegue de los planes de desarrollo pendientes, la flexibilidad de las condiciones financieras a las empresas y el desarrollo de políticas orientadas a mejorar el empleo como factores clave a la hora de fomentar el consumo.

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