Aunque inicialmente los técnicos del Consejo Insular de Aguas habían dicho que la rotura de La Laguna de Barlovento, que se registró el pasado sábado 16 de abril, estaba localizada en la galería y que no había afectado a la estructura o bañera del embalse, el vaciado de la misma ha dejado al descubierto en una de las paredes laterales dos agujeros, uno de ellos de grandes dimensiones, por los que se escapaba el agua que desde hace unos días ya no se está saliendo.
Ahora los técnicos deberán investigar las causas qué han provocado estos boquetes en las láminas de este embalse que ha perdido la mayor parte del agua almacenada, si bien la que todavía queda en el fondo se podrá aprovechar para el riego. Sin duda, una buena noticia para los agricultores que han visto cómo una gran cantidad de agua de gran calidad ha ido a parar al mar donde todavía hoy se puede apreciar una mancha de color canelo.
Los técnicos tendrán que averiguar también qué ha provocado la avería localizada en la galería nueva construida en 2005 y estimar lo que costará la reparación de estos daños que se creen que serán cuantiosos por la importancia de los mismos.
En el barranco de La Gata, en la parte alta, cerca del Lomo Romero, por donde salió en tromba el agua del embalse, ya no corre líquido pero el rastro y los daños dejados a su paso sí son visibles con escombros acumulados, tuberías rotas y huertas y pistas comidas. En esta zona, el agua pasó durante horas por encima de la carretera el día de la rotura. Algunos vecinos se acercaron hoy hasta allí para ver el estado en el que quedó el barranco y algunas propiedades. Para alguno de estos vecinos no hubo suerte porque el agua se llevó su huerta.
