Analizan el subsuelo de la avenida Marítima con un georradar para evitar 'sorpresas' en las obras

Las obras de remodelación de la avenida Marítima de Santa Cruz de La Palma han comenzado formalmente con la actuación del georradar, que la empresa encargada de realizar los trabajos ha traído a la Isla con el fin de tener una idea clara de lo que hay debajo de la superficie de esta zona de la capital palmera antes de entrar a levantar el suelo.

Conocer con exactitud la ubicación de las redes de saneamiento, de electricidad, de telefonía, etc, es uno de los objetivos de esta fase previa para que no se produzcan problemas a la hora de excavar. Ese tipo de sorpresas con las que se han encontrado en las obras del entorno de La Alameda y que han generado retrasos en los trabajos. Y es que, según han informado a este periódico, son instalaciones en muchos casos antiguas de las que no se tienen planos que definan con exactitud su ubicación.

Además de esta función, el georradar  permitirá obtener información sobre la existencia de posibles restos con valor patrimonial en el subsuelo de esta zona de Santa Cruz de La Palma, donde se esperan hallar al menos vestigios de la antigua muralla defensiva de la capital.

El representante de la empresa, en la reunión celebrada recientemente en el Teatro Circo de Marte para informar sobre estos trabajos, señaló que la intención que tienen es mantener los plazos previstos y concluir esta primera fase, hasta el cruce con la avenida de El Puente, en el mes de diciembre.