La reapertura de la única gasolinera de Barlovento, en vías de solución

El grave problema que se ha creado en el municipio de Barlovento con el cierre a finales de mayo de su única gasolinera parece estar en vías de solución tras el cambio de actitud de DISA, que ha accedido a sentarse a negociar con algunas personas interesadas en asumir la actividad.

Las negociaciones, según ha informado el alcalde, Jacob Qadri, van por buen camino y confía en que lleguen a buen puerto para que en los próximos meses el municipio cuente otra vez con este servicio que considera clave para la vida y la economía local.

La decisión de DISA de cerrar la gasolinera, supuestamente por baja rentabilidad, no ha sentado nada bien a los barloventeros que ahora tienen que desplazarse a San Andrés y Sauces como punto más cercano para repostar, lo que supone un doble gasto y pérdida de tiempo. El enfado es tal, que algunos vecinos han decidido "boicotear" a la empresa no poniendo gasolina en sus instalaciones como medida de protesta por el cierre que consideran injusto y que ha dejado al pueblo un poco "tocado".

El alcalde se reunió en junio en Madrid con el presidente de la compañía para evitar el desmantelamiento de la instalación, unas gestiones que parecen haber servido para que DISA haya suavizado su postura inicial reacia a cualquier tipo de solución.

Pese a que los meses de verano están por medio, todas las esperanzas están puestas por parte del consistorio en que el asunto se pueda resolver lo antes posible, siempre que no se tuerzan las cosas, por el bien del municipio que ha visto este cierre como un duro castigo.