Minuto de silencio por las víctimas del Covid-19

Dice el BOE:

El uso de mascarilla será obligatorio en la vía pública, en espacios al aire libre y en cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público, siempre que no sea posible mantener una distancia de seguridad interpersonal de al menos dos metros.

Mucha gente dice que ahora es obligatorio usar SIEMPRE mascarillas en los lugares públicos cerrados, pero leyendo el BOE interpreto que es obligatorio solamente cuando no sea posible mantener la distancia interpersonal de 2 metros.

Pues eso, vas por la calle y las personas que van sin mascarilla procuran alejarse dos metros incluso bajándose de las aceras…, pero la gente que usa mascarilla piensa que es inmune al virus solamente por llevarla puesta y entonces se te acerca y casi que te roza.

En las farmacias están vendiendo mascarillas a granel a unos 0,95 € la unidad. Son mascarillas que creo que vienen en paquetes de 50, pero las venden sin precinto, sin esterilizar ni nada, a pelo, te las dan dentro de una bolsa de plástico o en un pedazo de papel y a ver dónde estaban esas manos que tocaron esas mascarillas, me parece que eso es como vender un paquete de Aspirina por unidades, como dicen que hacen en Venezuela, “deme un cuarto de Aspirina”, bueno, ácido acetilsalicílico ya que no sé si los productos de Bayer se comercializan ahí.

Las mascarillas tienen caducidad, pero la gente no va a estar cambiándose de mascarillas a cada rato ni las va a desinfectar. Mucha gente usará la misma mascarilla durante todo el confinamiento, o sea, mascarillas llenas de patógenos por todas partes.

A mí me parece que las mascarillas son precisamente un foco de contagio, tanto del coronavirus como de otros patógenos peores.

Los guantes de plástico que tienes que usar al ir al supermercado, con eso se crea una atmósfera cálida y húmeda en las manos donde crecen fácilmente los patógenos. Luego la gente se quita los guantes de cualquier forma, se tocan la piel con parte del exterior del guante y luego se llevan la mano a la cara.

La última vez que fui al Hiperdino había una empleada que me tomó la temperatura. La próxima vez me controlarán también la tensión arterial, no te digo.

Se empieza controlando la temperatura y se termina haciendo un control total al estilo de la novela 1984 de George Orwell.