453 personas afectadas por el volcán siguen alojadas en hoteles seis meses después de la erupción

El volcán se apagó hace meses pero la emergencia continúa en la isla bonita y prueba de ello es que 453 personas afectadas siguen alojadas en hoteles seis meses después de la erupción. Una situación a la que se trata de buscar una solución ya que en su momento, cuando la emergencia estaba en manos del Gobierno canario, se pospuso hasta el mes de abril la salida de estas personas de las instalaciones hoteleras.

La consejera de Acción Social, Nieves Hernández, manifestó sin embargo en el último pleno que no es intención del Cabildo que a partir del 1 de abril, las personas que se encuentran albergadas en los hoteles, tres en concreto, salgan de dichas instalaciones como parece que han dicho algunos de los afectados.

No obstante, Hernández sí reconoció que se está trabajando desde el punto de “técnico” con la ayuda de psicólogos, trabajadores sociales y educadores para proporcionar a estas personas el apoyo necesario para que encuentren alternativas habitacionales y que de alguna manera puedan recuperar la vida que tenían antes de la erupción.

En los hoteles, detalló, hay albergadas personas que ya tienen disponible una vivienda y que por diferentes motivos han decidido no acudir a ellas. “Y nosotros como administración tenemos que promover que acudan a esa vivienda que ya tienen disponible”, añadió.

El Cabildo está trabajando de forma coordinada con el resto de administraciones presentes en la emergencia y “esperamos -dijo Hernández- que existan alternativas habitacionales bien en alquiler o en otra modalidad para poder dar respuesta a estas personas y para que esta alternativa que surgió inicialmente como albergue vaya terminando”. Los hoteles, agregó, no son lugares para vivir, “estarán allí mientras la emergencia continúe pero tenemos que ir propiciando que las personas alojadas puedan salir de los mismos”.

La solución no es sencilla porque con la erupción se ha agravado el problema de la vivienda en la isla. Por el momento se han entregado a afectados por el volcán cerca de un centenar de casas por parte del Gobierno canario, que también ha optado por otras alternativas como las viviendas tipo contenedor y por las prefabricadas de madera, pero todavía no están operativas y no cubren la demanda existente.